Centro de Cuido

La mayoría de las mujeres que forman parte del Programa de Restauración son madres de uno o más niños pequeños que dependen exclusivamente de ellas. Para garantizar su acceso a talleres, cursos y procesos de empoderamiento sin exponer a sus hijos a situaciones de riesgo, es fundamental contar con un espacio que brinde apoyo en su cuidado y atención directa mientras ellas permanecen en la Fundación. Una de las principales vulnerabilidades de quienes han sobrevivido al Comercio Sexual y/o la Trata de Personas es la falta de redes de apoyo y la escasez de recursos económicos, lo que hace aún más necesaria esta iniciativa.

Nuestro objetivo es ofrecer un entorno seguro de cuidado directo para sus hijos, permitiendo que las madres gestionen su proceso de restauración con tranquilidad. De este modo, contribuimos a la protección de estos niños y niñas, quienes enfrentan múltiples vulnerabilidades tanto por su contexto social complejo y la ausencia de redes de apoyo como por su condición de menores de edad, que los hace depender de adultos para la garantía de sus derechos.

Por ello, promovemos un espacio de atención integral que no solo cubra sus necesidades básicas, sino que también estimule su desarrollo y aprendizaje. Además, impartimos talleres sobre derechos de la niñez, valores y habilidades para la vida, especialmente diseñados para niños de entre 6 y 10 años, con el propósito de fortalecer su bienestar y resiliencia.